Día de una mujer con nuevo trabajo y casa nueva.
3:00 a.m.: Despertar con una nariz mojada pegada a la mía. Sacar a Lilo del cuarto. Volver a dormir.
5:30 a.m.: Despertarme. Levantar a Mary para que se arregle. Seguir bajo las cobijas hasta que sea completamente necesario que me levante (Esto ultimo casi siempre es después que Mary me grita que siempre llega tarde al colegio).
6:30 a.m.: Salida de la casa.
6:35 a.m.: Verdadera salida de la casa. He tenido que devolverme tres veces, una por el celular, otra porque deje el almuerzo y tercera, porque se me olvido cerrar la puerta.
6:36 a.m. – 7:00 a.m.: Pequeña pelea en el tráfico. Mary promete nunca volver a montarse en el carro conmigo. Dejo a Mary en el colegio y sigo a mi trabajo.
7:30 a.m.: Llegada a la oficina. (Antes me pare a comprar empanadas en la esquina, a pesar de que tengo una barra de granola y un yogurt en la cartera).
7:40 a.m. -11:30 a.m.: Bajo vigilancia estricta. Además de trabajar como esclava, intento ver alguno blogs en Internet. No puedo leer mucho, pues me patrullan constantemente. Mi escritorio queda al lado de la cafetera, así que escucho todos los chismes de la oficina.
11:30 a.m. – 1:00 p.m.: Almuerzo en el escritorio. Navego por Internet como adicta. Mis compañeras de trabajo se quejan de que no hablo. Las ignoro.
1:00 p.m. – 6:00 p.m.: Más trabajo y más vigilancia. Entre facturas, llamadas desesperadas a CANTV, CIA de Gas, Jardinero y Carpintero. Exhaustiva revisión de mis cuentas bancarias por Internet, a ver si se produjo un milagro y hay dinero en mis cuentas. Negativo el procedimiento.
6:01 p.m. – 7:00 p.m.: Recorrido de la oficina a la casa. Los carros se han triplicado. Encontronazo con Autobusero, con amenazas incluidas; el se ha metido con mi mama y yo le dije marginal; todo queda olvidado con el cambio de la luz del semáforo. Repaso lista mental de cosas que hacer en la casa: Abrir cajas, barrer, etc., etc.
7:05 p.m. a 8:30 p.m.: Arribo al hogar. Saludar a Mary y a Lilo. Preparar cena. Regañar a Mary por no limpiar donde hizo sus necesidades Lilo. Oír promesas de limpieza. Fregar los platos. Defender a Mary de los ataques (jugando) de Lilo. Limpiar pupu de perro con Lilo cargada en el otro brazo.
8:35 p.m.: Darme cuenta que entre todos los canales del cable, el que no se ve es Sony. Maldecir por doquier. Llamar a Papel a contarle mis penas. Ver cajas y decidir que mejor las abro mañana. Ver WB.
9:00 a.m. – 11:00 p.m.: a) Ver Tv. b) Quitarle a Lilo a Mary, porque la esta mordiendo c) Limpiar pipi y pupo de perro. Repetir cuantas veces sea necesario.
11:30 p.m.: Mortificarme porque es muy tarde y debería estar dormida hace una hora. Apagar TV. Tener pequeña lucha cuerpo a cuerpo con Lilo para que se baje de la cama. Levantarme 6 veces, a revisar ventanas, puertas, convencida que no las cerré. Después de acostarme, darme cuenta que no apague las luces del patio. Regresar a la cama, solo para conseguir a Lilo en mi almohada.
12:00 a.m. Al fin a punto de dormir, dándole gracias a Dios por tener casa, hija, novio y perro.
5:30 a.m.: Despertarme. Levantar a Mary para que se arregle. Seguir bajo las cobijas hasta que sea completamente necesario que me levante (Esto ultimo casi siempre es después que Mary me grita que siempre llega tarde al colegio).
6:30 a.m.: Salida de la casa.
6:35 a.m.: Verdadera salida de la casa. He tenido que devolverme tres veces, una por el celular, otra porque deje el almuerzo y tercera, porque se me olvido cerrar la puerta.
6:36 a.m. – 7:00 a.m.: Pequeña pelea en el tráfico. Mary promete nunca volver a montarse en el carro conmigo. Dejo a Mary en el colegio y sigo a mi trabajo.
7:30 a.m.: Llegada a la oficina. (Antes me pare a comprar empanadas en la esquina, a pesar de que tengo una barra de granola y un yogurt en la cartera).
7:40 a.m. -11:30 a.m.: Bajo vigilancia estricta. Además de trabajar como esclava, intento ver alguno blogs en Internet. No puedo leer mucho, pues me patrullan constantemente. Mi escritorio queda al lado de la cafetera, así que escucho todos los chismes de la oficina.
11:30 a.m. – 1:00 p.m.: Almuerzo en el escritorio. Navego por Internet como adicta. Mis compañeras de trabajo se quejan de que no hablo. Las ignoro.
1:00 p.m. – 6:00 p.m.: Más trabajo y más vigilancia. Entre facturas, llamadas desesperadas a CANTV, CIA de Gas, Jardinero y Carpintero. Exhaustiva revisión de mis cuentas bancarias por Internet, a ver si se produjo un milagro y hay dinero en mis cuentas. Negativo el procedimiento.
6:01 p.m. – 7:00 p.m.: Recorrido de la oficina a la casa. Los carros se han triplicado. Encontronazo con Autobusero, con amenazas incluidas; el se ha metido con mi mama y yo le dije marginal; todo queda olvidado con el cambio de la luz del semáforo. Repaso lista mental de cosas que hacer en la casa: Abrir cajas, barrer, etc., etc.
7:05 p.m. a 8:30 p.m.: Arribo al hogar. Saludar a Mary y a Lilo. Preparar cena. Regañar a Mary por no limpiar donde hizo sus necesidades Lilo. Oír promesas de limpieza. Fregar los platos. Defender a Mary de los ataques (jugando) de Lilo. Limpiar pupu de perro con Lilo cargada en el otro brazo.
8:35 p.m.: Darme cuenta que entre todos los canales del cable, el que no se ve es Sony. Maldecir por doquier. Llamar a Papel a contarle mis penas. Ver cajas y decidir que mejor las abro mañana. Ver WB.
9:00 a.m. – 11:00 p.m.: a) Ver Tv. b) Quitarle a Lilo a Mary, porque la esta mordiendo c) Limpiar pipi y pupo de perro. Repetir cuantas veces sea necesario.
11:30 p.m.: Mortificarme porque es muy tarde y debería estar dormida hace una hora. Apagar TV. Tener pequeña lucha cuerpo a cuerpo con Lilo para que se baje de la cama. Levantarme 6 veces, a revisar ventanas, puertas, convencida que no las cerré. Después de acostarme, darme cuenta que no apague las luces del patio. Regresar a la cama, solo para conseguir a Lilo en mi almohada.
12:00 a.m. Al fin a punto de dormir, dándole gracias a Dios por tener casa, hija, novio y perro.
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Labels: casa, Mary, Papel, perro, trabajo oficina